El desarrollo alcanzado por las nuevas sociedades producto de la integración económica y cultural exige el dominio de diferentes lenguas. Esto provoca grandes desafíos a los que un estudiante tiene que atreverse para poder entrar en un mundo donde estamos en permanente comunicación con otros países con lenguas diferentes.
Aprender idiomas constituye una gran herramienta a la hora de progresar como estudiante y profesional. Y por más que es recomendable aprender una segunda lengua desde la infancia, nunca es tarde para desarrollar esta habilidad.
El aprendizaje de otros idiomas permite enriquecer la vida, experimentar nuevas ideas, ejercitar la mente, beneficiarse de la diversidad cultural mundial, obtener becas para estudios de posgrado, trabajar en una empresa multinacional, además de una capacidad para expresarse ante los demás de forma clara y precisa, aumentando así las relaciones sociales.
Los principales beneficios de aprender un nuevo idioma son:
- Mejor toma de decisiones.Un cerebro que sabe moverse rápidamente entre dos idiomas es uno que tiene facilidad para analizar varias situaciones simultáneas, una habilidad indispensable para tomar mejores decisiones.
- Aumento de la memoria.Conocer dos o más idiomas requiere de mucha dedicación, atención a los detalles y, lo más importante, una memoria activa y eficiente que logre retener una gran cantidad de información.
- Reduce la posibilidad de enfermedades mentales.Los médicos han descubierto que las personas bilingües fortalecen su cerebro, lo cual provoca que se reduzca la posibilidad y los efectos de padecer enfermedades mentales como Alzheimer y demencia.
- Crecimiento profesional.Uno de los requisitos más demandados en el ámbito laboral es el dominio de un segundo idioma. Los profesionales bilingües son reconocidos por su preparación con mejores puestos y mayores salarios.
- Viajar se hace más divertido. Cuando se aprende un nuevo idioma los viajes cambian completamente. En lugar de elegir alojarse en hoteles o grandes resorts turísticos, se puede encontrar el valor para mezclarse con la gente local y viajar fuera de los tours y las rutas más turísticas. La gente reacciona muy favorablemente cuando te acercás a ellos y tratás de hablar su lengua materna. Un buen conocimiento del idioma del lugar en el que se está, nos permite volver a casa con muchos recuerdos emocionantes de las vacaciones.
- Vivir, trabajar o estudiar en el extranjero. Un nuevo idioma puede permitirte vivir, trabajar o estudiar en otros países. Especialmente para los más aventureros, esta es la oportunidad perfecta. ¿Soñaste alguna vez con vivir en algún país europeo? ¿O te gustaría ser aceptado en una universidad americana? Aprender un idioma puede abrirte las puertas a estos destinos.
- Experimentá nuevas culturas. El aprendizaje de una lengua extranjera no se centra sólo en la memorización de vocabulario y el saberse correctamente la gramática, sino que también conlleva aprender sobre la cultura del país en el que se utiliza el idioma. Es necesario saber sobre la vida cotidiana de la gente del lugar, sus tradiciones y su forma de pensar. Un nuevo lenguaje puede ampliar tus horizontes enormemente.